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Convergencia Renovadora Social Siglo 21

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El asesinato de Morena: un reflejo de la inseguridad y la injusticia en Argentina

Compañeritos de Morena, lloran desconsolados en los hombros de sus madres en el sepelio de nena asesinada el 9 de Agosto. ¿todos somos Morena! Foto Clarín

El crimen de Morena es un ejemplo más de la grave situación de inseguridad y violencia que se vive en el país, especialmente en el conurbano bonaerense, donde los delitos contra la vida y la propiedad son frecuentes y muchas veces quedan impunes.

Por Eleterio Gómez

El miércoles 9 de agosto de 2023, Morena Domínguez, una niña de 11 años, fue asesinada en Lanús, provincia de Buenos Aires, cuando se dirigía a la escuela. Dos motochorros la abordaron para robarle su mochila, que contenía un celular de bajo costo, y le propinaron una brutal golpiza que le causó una hemorragia interna y un paro cardíaco. El hecho quedó registrado por cámaras de seguridad y generó una gran conmoción e indignación en la sociedad argentina. El crimen de Morena es un ejemplo más de la grave situación de inseguridad y violencia que se vive en el país, especialmente en el conurbano bonaerense, donde los delitos contra la vida y la propiedad son frecuentes y muchas veces quedan impunes. Este ensayo tiene como objetivo analizar las causas y las consecuencias del asesinato de Morena, así como las posibles soluciones para prevenir y combatir este tipo de hechos.

Causas del asesinato de Morena

El asesinato de Morena no es un hecho aislado, sino que responde a una serie de factores sociales, económicos, políticos e institucionales que favorecen la proliferación de la delincuencia y la violencia en Argentina. Algunas de estas causas son las siguientes:

La pobreza y la desigualdad: Según el último informe del INDEC, el 42% de la población argentina vive por debajo de la línea de pobreza y el 10,5% en situación de indigencia. Estos índices se han agravado por la crisis económica y social provocada por la pandemia del COVID-19, que ha generado una caída del PBI, una inflación galopante, una pérdida de empleos y una reducción del poder adquisitivo. La pobreza y la desigualdad son factores que generan exclusión social, marginalidad, falta de oportunidades y frustración, lo que puede conducir a algunas personas a recurrir al delito como forma de subsistencia o de protesta.

– La falta de educación y prevención: La educación es un derecho humano fundamental y un factor clave para el desarrollo integral de las personas y las sociedades. Sin embargo, en Argentina hay un alto nivel de deserción escolar, especialmente entre los sectores más vulnerables, que ven en la escuela un espacio ajeno a sus necesidades e intereses. Además, hay una falta de políticas públicas integrales que promuevan la prevención de la violencia desde una perspectiva multidimensional, que incluya la promoción de valores, el fortalecimiento familiar, el acceso a la salud, el deporte, la cultura y el ocio.

– La corrupción y la impunidad: La corrupción es un fenómeno que afecta a todos los niveles del Estado argentino, desde el poder ejecutivo hasta el poder judicial, pasando por el poder legislativo y los organismos de control. La corrupción implica el uso indebido o el desvío de los recursos públicos para fines privados o partidarios, lo que genera un deterioro de la calidad institucional, una pérdida de confianza ciudadana y una falta de transparencia y rendición de cuentas. La impunidad es la consecuencia directa de la corrupción, ya que implica la ausencia o la deficiencia de sanciones para los responsables de los delitos, lo que genera un clima de inseguridad jurídica y una sensación de injusticia social.

– La ineficacia y la violencia policial: La policía es la institución encargada de garantizar el orden público y la seguridad ciudadana mediante la prevención y el combate del delito. Sin embargo, en Argentina hay una serie de problemas que afectan al funcionamiento y al desempeño policial, tales como la falta de recursos humanos, materiales y tecnológicos; la falta de capacitación profesional y ética; la falta de coordinación entre las distintas fuerzas; la infiltración del narcotráfico y el crimen organizado; y la violación sistemática de los derechos humanos. Estos problemas se traducen en una ineficacia y una violencia policial, que se manifiestan en la incapacidad para prevenir y esclarecer los delitos, así como en el uso excesivo o ilegítimo de la fuerza, que muchas veces deriva en casos de gatillo fácil, torturas, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales.

Consecuencias del asesinato de Morena

El asesinato de Morena no solo tuvo un impacto devastador en su familia, sus amigos y su comunidad, sino que también tuvo una serie de repercusiones sociales, políticas y mediáticas que evidenciaron la gravedad del problema de la inseguridad y la violencia en Argentina. Algunas de estas consecuencias son las siguientes:

– La movilización social: El crimen de Morena generó una gran conmoción e indignación en la sociedad argentina, que se expresó a través de diversas manifestaciones y reclamos. El mismo día del hecho, cientos de vecinos se concentraron frente a la escuela donde estudiaba Morena para exigir justicia y seguridad. Al día siguiente, se realizó una marcha multitudinaria desde el Congreso hasta la Plaza de Mayo, donde se leyó un documento con propuestas para prevenir y combatir la violencia contra los niños. Además, se realizaron marchas y actos en distintas ciudades del país, como Cipolletti, Rosario, Córdoba y Mendoza, donde se repudió el asesinato de Morena y se solidarizó con su familia.

– La reacción política: El crimen de Morena también tuvo una fuerte repercusión política, ya que ocurrió a pocos días de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 13 de agosto. El hecho generó un clima de tensión y confrontación entre los distintos actores políticos, que se acusaron mutuamente de ser responsables o cómplices de la situación de inseguridad y violencia que vive el país. Además, el hecho obligó a suspender o modificar las actividades de campaña electoral de los principales candidatos, que expresaron su repudio al crimen y su solidaridad con la familia de Morena.

– La cobertura mediática: El crimen de Morena también tuvo una amplia cobertura mediática, tanto en los medios tradicionales como en las redes sociales. El hecho fue noticia nacional e internacional, y generó un gran interés y debate público. Los medios difundieron las imágenes del asalto captadas por las cámaras de seguridad, así como los testimonios de los testigos, los familiares y los allegados de Morena. También informaron sobre el avance de la investigación judicial, que logró detener a ocho sospechosos del crimen. Asimismo, los medios abordaron el tema desde distintas perspectivas y enfoques, dando lugar a la opinión de expertos, analistas, referentes sociales y políticos.

Soluciones para el asesinato de Morena

El asesinato de Morena es un hecho que no puede quedar impune ni olvidado. Es necesario que se haga justicia por Morena y por todas las víctimas de la violencia en Argentina. Pero también es necesario que se tomen medidas para prevenir y combatir este tipo de hechos, que atentan contra la vida y la dignidad humana. Algunas de estas medidas son las siguientes:

– Fortalecer el Estado de derecho: Es fundamental que se fortalezca el Estado de derecho como garante de los derechos humanos y las libertades fundamentales. Esto implica consolidar la democracia como sistema político; garantizar la separación e independencia de los poderes públicos; combatir la corrupción y la impunidad; mejorar la calidad institucional; promover la transparencia y la participación ciudadana; y respetar el orden constitucional y legal.

– Mejorar el sistema judicial: Es imprescindible que se mejore el sistema judicial para que sea eficaz, ágil, accesible e imparcial. Esto implica dotar al sistema judicial de los recursos humanos, materiales y tecnológicos necesarios para investigar, juzgar y sancionar a los responsables de los delitos; capacitar a los operadores judiciales en materia de derechos humanos, perspectiva de género e infancia; garantizar el debido proceso y el acceso a la justicia para las víctimas.

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